Ingredientes:
1 pan de pueblo pequeño del día anterior
8 dientes de ajo enteros
4 huevos de granja
150 gr. de jamón ibérico
pimentón dulce
1 ramíta pequeña de tomillo
aceite de oliva virgen extra
sal
1 1/2 de caldo vegetal **
Preparación:
Cortar el pan a rebanadas pequeñas y tostarlo al horno con un poco de aceite por encima, durante unos 10 minutos, reservar.
Cortar el jamón a trozos medianos y pasarlo por la sartén con un poco de aceite a fuego bajo, durante unos 2 minutos. Añadir los dientes de ajo enteros y dejar que se hagan con el jamón, durante 10 minutos también a fuego bajo y tapado.
Cuando hayan transcurrido los 10 minutos, apartar la sartén del fuego y añadir una cucharada sopera rasa de pimentón dulce, remover y reservar fuera del fuego para que no se queme el pimentón.
Poner a hervir el caldo de verduras, con la ramíta de tomillo, el jamón con los ajos, el pimentón y una cucharada sopera de aceite. Dejarlo hirviendo a fuego muy bajo, durante 10 minutos, para que coja todo el sabor de los ingredientes.
Cuando hayan transcurrido los 10 minutos, echar los huevos de uno en uno y remover muy bien para que los huevos se cocinen y formen hilos. Dejarlo por espacio de 5 minutos, para que se termine de hacer la sopa y los huevos queden bien cuajados. Probar y rectificar de sal si es conveniente.
En un plato o un bol de barro, pondremos las rebanadas de pan tostado que nos parezcan convenientes, dependiendo de lo espesa que queramos la sopa y añadiremos el caldo con el jamón y el huevo deshilado.
Servir inmediatamente.
Vino recomendado:
Un tinto tipo, Coto de Hayas 2014 de Zaragoza o un, Añares 2012 de la Rioja.
Servir entre 16-18 grados.
Consejos y comentarios:
El pan de pueblo o payés, se puede sustituir por pan de barra, pero como mejora el plato es con pan rústico y mínimo con un día de antigüedad. Si tiene dos o tres días, mucho mejor, pues el pan y sobre todo el rústico, mejora con el tiempo y absorbe mejor los sabores.
El pan de xapata y el gallego, también son muy adecuados para este plato, pero mejor si son de panadería, que de supermercado. No obstante, se puede hacer con pan normal y corriente tipo baguette, no es lo mismo, pero tampoco queda malo.
El jamón puede ser del normal, pero al igual que con el pan, cuanta más calidad tengan los productos, mejor será el resultado final.
Los huevos, si son de granja, camperos o ecológicos, serán más sabrosos y la sopa ganará mucho, pero si queremos hacerlo con huevos normales, se puede hacer sin problema, salvo lo que decimos siempre, más calidad, es más sabor y más bueno.
Los ajos enteros, se pueden poner en cada plato, a modo de adorno o para comerse. Yo los pongo enteros, porque hay gente que aunque le guste el sabor sutil del ajo, comerlos o encontrarlos en la sopa no les gusta, de esta manera se ven y se pueden apartar y no consumir, si no nos gustan.
** El caldo de verduras, puede ser alguno que nos haya sobrado de cocinar col, judías verdes, patatas hervidas solas o con verdura, o judías blancas.
Si no tenemos un caldo de verduras que nos haya sobrado, lo podemos hacer en un momento, con agua mineral, sal, una zanahoria, una cebolla, un poco de perejil fresco y un tomate pequeño. Mejor no poner nada muy fuerte que tape el sabor de la sopa como apio, laurel, etc.
También le podemos poner agua mineral directamente, quedará mejor con el caldo sencillo, pero el agua también es válida.
Esta sopa, es ideal para subir las defensas pues el ajo y el tomillo son unos excelentes anti bacterias y el ajo es un antibiótico natural excelente.
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